lunes, 3 de julio de 2017

DE PANTANOS PSICODELICOS

   

Por Adriano Alarcón
El próximo miércoles 5 de julio aterrizan en lo alto de la ciudad de Toluca (en el Foro Landó) desde Argentina, Los Espíritus, banda liderada por Maxxi Prietto (Muchos lo recordaran por; Prietto viaja al Cosmos con Mariano) la banda recientemente estrenó su nuevo plato, titulado “Agua Ardiente” y se han montado en una gira, por fortuna y gracias a la diligencia de Luis Flores y el equipo del Foro Landó, el terreno rojo tendrá oportunidad de verlos en acción. La agrupación tiene un particular estilo lacónico al dar testimonio de historias afiladas y rabiosas, el ADN blusero de la banda remite a personajes de grueso calibre como: Big Joe Williams, Robert Johnson, Blind Lemon Jefferson, entre otros.


Cada uno de los cortes que integran el nuevo disco “Agua Ardiente” (Tan bueno como las placas anteriores) se convierten en epifanías que se traducen en placeres musicales, con poder de reconfigurar gustos y rumbos, a su vez funcionan como insignias distintivas para sobreponerse a la soledad, con ritmos genuinos y punzantes (cualidades natas del Blues). No hay duda que las rolas son ventanas a realidades paralelas, crudas y negligentes, picotean y generan desafectos que a su vez restituyen empatías a través de irónicas coincidencias, convirtiendo a los que se dejen arrastrarse y sujetarse de los oídos… en alguien mes excéntrico y sincero. Los afilados acordes persiguen, tirando con rabia y en momentos muy precisos, enrojecemos de vergüenza, revoloteando entre cortejos psicodélicos.  

Los Espíritus generan tiros certeros que sacuden nuestras percepciones, nos arrojan al pantano y curiosamente cedemos a la voluntad de hundirnos en el maravilloso fango psiconautico. “Agua Ardiente” está conformado por armonías de lo cotidiano, que conectan de forma autentica con realidades y paisajes ruinosos, tal vez la mayor cualidad de cada uno de los discos de la banda, habita en las reflexiones de palabras que dicen más sobre la velocidad de la vida, desde una aparente simpleza y repuntan hasta el extremo de un éxtasis piadoso. La música de Los Espíritus va más allá de una escucha superficial, sugerida por un algoritmo en Spitify, mas allá de esa ropa sucia, de esas marañas tan profundas he incomodas que constriñen. Las consecuencias se descifran, o se acentúa el puñado de alegrías efímeras. El reto para el próximo miércoles, será empuñar la mirada, dirigirla y sostenerla fijamente en los ojos del Blues, tal vez reciban un porrazo en la boca del estómago, pero les aseguro que lo presumirán como el primer ojo morado, consecuencia de un buen golpe, en alguna pelea callejera después de ser… echado de un bar. Malabarismo de momentos y emociones visuales, auditivos… en fin, las posibilidades sobre el escenario es lo que nos espera la noche de un miércoles, en lo alto de la ciudad de Toluca. Con cariño chido al Alonso Guzmán, por las muchas veces que lo echaron del bar.   

2 comentarios:

  1. Que buena descripciónhacia los espíritus ��

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  2. Cuando escucho este disco tengo la impresión de que a Don Juan Matus le dieron una guitarra eléctrica a los 18 años.

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